La tercera isla por tamaño de Europa tras Sicilia y Cerdeña, comparte con Grecia el nombre de su monte más alto, Olimpo, aunque el original de los dioses es el heleno. Cuna de culturas, por la isla chipriota han pasado todo tipo de civilizaciones, comenzando por los micénicos, los fenicios y los griegos. Egipto se hizo con el poder hasta que Alejandro Magno la conquistó.
La isla acabó bajo dominio del Imperio Romano para pasar a ser el primer reino cristiano. Comenzó entonces la era de las Cruzadas y Chipre permaneció bajo dominio árabe hasta que Ricardo Corazón de León la reconquistó en 1192.
Durante el Renacimiento, Chipre permaneció bajo dominio veneciano hasta la conquista de los turcos otomanos en 1570. Posteriormente, en el siglo XVIII Chipe fue designado como colonia británica, situación que se mantiene en el tiempo hasta la independencia de la isla en 1960.
Ante tal baile de culturas, Chipre se conforma como uno de los destinos más interesantes para visitar en el área del Mediterráneo. Su capital, Nicosia, ofrece varias atracciones que no te puedes perder:
