Dicen que el saber no ocupa lugar pero lo cierto es que, recorriendo algunas de las bibliotecas más famosas de Europa, no sería descabellado pensar todo lo contrario. El viejo continente cuenta con instalaciones que atesoran cientos de siglos de historia, por no hablar de su decoración y belleza arquitectónica que bien las hace merecedoras de una visita.
París, Dublín, Coimbra o Stuttgart son algunos de los escenarios que pueden presumir de tener algunas de las bibliotecas más populares de Europa. Aunque en España también contamos con buenos ejemplos como la biblioteca de la Universidad de Salamanca. Si eres un viajero frecuente, te proponemos cinco escenarios que no te puedes perder y que podrás visitar con total tranquilidad si, antes de partir, incluyes en tu maleta un seguro de viaje anual. ¿Arrancamos?
Las ciudades universitarias tienen un encanto especial y quienes han visitado Salamanca no albergan ninguna duda. De entre los muchos encantos con los que cuenta esta coqueta urbe, la biblioteca de la Universidad de Salamanca es, sin duda, uno de los más curiosos. ¿Sabías que fue la primera de estas características que se fundó en Europa allá en 1254 por orden de Alfonso X, El Sabio?
En sus inconfundibles librerías, obra de Churriguera, que hoy pueden contemplarse a través de una cancela acristalada, dormitan más de 50.000 libros editados entre los siglos XVI y XVIII. Aunque en la actualidad está reservada a centro de investigación, hay visitas guiadas para acercarse un poco más a su historia y riqueza bibliográfica.
Si eres de los que disfruta de escapadas a distintos rincones del viejo continente con frecuencia, sabrás que tu mejor compañero de viaje ante cualquier eventualidad es un seguro de viaje anual. Probablemente también tengas claro que cada visita es diferente y, tanto si conoces Dublín (Irlanda) como si es la primera vez que viajas a la ciudad, no puedes dejar de visitar la Biblioteca Trinity College.
La universidad más antigua de Irlanda no solo alberga la mayor colección de manuscritos y libros impresos del país sino que, además, ha inspirado películas como Stars Wars o Harry Potter. Pero aún hay más. En el edificio de la Antigua Biblioteca se encuentra la sala principal que, bajo el nombre de ‘Long Room’ (mide 65 metros de largo), acoge más de 200.000 libros antiguos. ¿La ‘joya de la corona’? El Libro de Kells, un manuscrito del siglo IX que está acompañado de una exposición que explica a fondo su contenido.
París no es solo la ciudad del amor, como muchos la reconocen. La capital gala es, además, el hogar de la Biblioteca Nacional de Francia, un edificio a orillas del Sena, garante del mantenimiento y la promulgación del patrimonio cultural escrito en Francia. Y es que, al igual que ocurre con la biblioteca Trinity College de Dublín, en este caso en Irlanda; la biblioteca Nacional de Francia debe guardar un ejemplar de todas las obras publicadas en el país.
Manuscritos, colecciones de mapas, monedas, registros sonoros y hasta una versión digital que responde al nombre de Gallica, forman parte de los fondos de esta instalación que cuenta, además, con su propia editorial y es sede de conferencias, proyecciones y hasta conciertos.
¿Has tomado nota? Si estás decidido a marcarte un calendario de escapadas culturales por el viejo continente, tu seguro de viaje anual te permitirá hacerlo totalmente protegido ante cualquier eventualidad en todo momento.