Las maletas facturadas, los móviles registrando los últimos selfies previos a tu partida y ¡sorpresa! El panel que informa de tu vuelo anuncia que se ha retrasado. En ese momento cruza por tu mente con una mezcla de estupor y rabia aquello que entonaba la mítica canción de Antonio Orozco “llevo la vida planeando este viaje…” y de pronto, paras, respiras y piensas ‘bueno, puedo esperar’. El retraso de un vuelo puede darte un tiempo extra para disfrutar de un rato de charla animada con tus amigos previo al embarque pero, si viajas con niños o lo haces por negocios, por ejemplo, la situación puede complicarse notablemente.
Cuando los minutos se transforman en horas, la paciencia se agota y antes de que te des cuenta, estarás pensando en todo lo que te gustaría hacer a los responsables de compañía aérea en cuestión. Reclamar el retraso del vuelo está, como no podía ser de otra manera, en la lista de opciones y ¿sabes qué? Aunque nadie te devolverá las horas de vacaciones perdidas, ni calmará a tus retoños cuando pierdan la paciencia fruto de la espera, ni tampoco nadie te hará llegar puntual a tu reunión, la buena noticia es que tienes derecho a una indemnización por el retraso de tu vuelo.
Antes de entrar en detalle al capítulo de la indemnización por retraso del vuelo, es interesante que sepas que, más allá de la compensación económica por retraso del avión, tienes otra serie de derechos como viajero. El primero de ellos tiene que ver con el acceso a la información y es que, si el vuelo se retrasa al menos dos horas, la compañía debe facilitarte por escrito los pasos a seguir en materia de asistencia y compensación.
Un retraso de cinco horas o más puede invitarte a renunciar a tu periplo viajero y, en estos casos, puedes reclamar el reembolso del coste íntegro del billete e, incluso, solicitar vuelo de vuelta a tu punto de partida si procede. Eso sí, si a consecuencia del retraso del vuelo pierdes el siguiente y viajabas con otra compañía, la aerolínea no tendrá obligación de abonarte el siguiente pasaje.
Pero el capítulo de derechos del viajero también establece un apartado espacial para la atención a los pasajeros. Las consideraciones varían en función de las horas de retraso del vuelo y la distancia a recorrer pero, en líneas generales, contempla el abastecimiento de comida y agua gratuitas para los afectados; llamadas gratuitas, correos electrónicos o mensajes; y, en casos extremos, hasta alojamiento gratuito para los viajeros.
Tener que reclamar un vuelo no es el mejor de los escenarios pero la posibilidad de conseguir una indemnización por el retraso de tu vuelo mitigará, en parte, el disgusto por las molestias sufridas. Las compensaciones económicas se aplican siempre que el retraso del vuelo supere las tres horas estableciéndose tres tramos con diferentes cuantías, en función de la distancia:
- 250 euros para vuelos de entre 0 y 1500 kilómetros.
- 400 euros para vuelos de entre 1500 y 3000 kilómetros.
- 600 euros cuando la distancia sea superior a los 3500 kilómetros.
Si tienes intención de reclamar el retraso de tu vuelo es importante que guardes tu billete de avión, tarjeta de embarque y cualquier ticket de comida o bebida relativo a la espera. También deberás solicitar a la compañía un justificante por escrito de los motivos del retraso y, en caso de que se den las circunstancias descritas anteriormente, solicites la asistencia correspondiente a la que tienes derecho como viajero.
El marco legal vigente parece claro al respecto de los derechos del pasajero en cuestiones relativas al retraso de vuelos. Sin embargo, la tarea de reclamar el retraso del vuelo en cuestión, no siempre resulta sencilla. El desconocimiento de los pasajeros al respecto de sus derechos propicia, en ocasiones, que los procesos de reclamación se dilaten e, incluso, los importes ofrecidos a modo de compensación sean inferiores a lo que realmente correspondería a una indemnización por retraso de vuelo bien gestionada.
Contar con el asesoramiento legal de un experto puede ayudarte en la tarea que puede incluso tener que lidiar con escenarios poco favorables y es que, si el retraso del vuelo no es responsabilidad de la compañía aérea, esta quedará exenta de atender cualquier presunta obligación de compensación por retraso de vuelo. Entre las circunstancias extraordinarias que eximirían a las aerolíneas de esa indemnización por retraso del vuelo están recogías el cierre del aeropuerto o el espacio aéreo, los riesgos de seguridad inevitables, huelgas o condiciones meteorológicas adversas, entre otros.
Sin embargo, no hay por qué tirar la toalla a la primera ya que es posible reclamar el retraso del vuelo y conseguir una indemnización por el mismo siempre y cuando se demuestre que la aerolínea en cuestión podría haber evitado el problema. En estos casos la tarea puede complicarse notablemente y, en consecuencia, contar con un asesoramiento especializado es la mejor herramienta para explorar todas las opciones.